domingo, 29 de septiembre de 2013

LA REGIÓN DE MURCIA HERIDA DE MUERTE. EL PUYAZO FINAL Y DEFINITIVO

A un pueblo hay muchas maneras de hacerle el mayor de los daños, solo  depende de la maldad y perversión de quien cometa el delito. Un asesinato, un crimen, se puede cometer de muchas formas, a sangre fría o caliente, siendo, cualquiera de ellas, igual de execrable y repugnante. Arrebatar a un pueblo todo cuanto le pertenecía y conducirlo a la miseria y ruina más absoluta y hacerlo en un lento y premeditado proceder, es un crimen que en esta región dura 18 años.

La alevosía, que no es otra cosa que la cautela para asegurar la comisión de un delito contra las personas, sin riesgo del delincuente, junto a la necesaria premeditación, siempre ha sido hábilmente enmascarada en señuelos y artimañas que distraían de las aviesas intenciones de sus legales criminales. Las mentiras, una tras otra y hasta lo infinito, se han ido sucediendo y, siempre, la última superaba a la anterior, de tal manera que la paranoia y psicopatía de sus creadores se ha ido tornando en mayor ofuscación propia, llegando a anidar la complacencia  en todos los demás inocentes y crédulos miembros de ese cuerpo social.

Un criminal exento de responsabilidades administrativas, políticas e incluso penales, es un engendro, que se hace y crece junto a su inmaculado y omnímodo proceder. Quien consigue alcanzar tales cotas de inmunidad se tiene ganado, sin duda, el puesto en algún museo del crimen y del horror en la gestión pública.

Legislatura tras legislatura, con trampas o sin ellas, revalidar sus mentiras y profundizar en las infinitas heridas provocadas a toda la ciudadanía, no es una conjunción fácil de hacer, a no ser, que aquellas partes de ese cuerpo social que debieron cumplir con su función de vigilantes del sistema, sean parte interesada en el crimen. Solo así sería comprensible tal cantidad de despropósitos llevados a cabo contra los intereses de toda la población de esta mal llamada región de Murcia. Complicidad necesaria, silenciada y, seguramente hasta chantajeada. Cobardía e hipocresía, al fin y al cabo y que, de una u otra forma, también son o serán víctimas de tanto y tanto sin sentido.

Es, ha sido necesaria, la colaboración interesada de unos cuantos para que tal crimen, además de quedar impune, haya tenido las consecuencias tan terribles en tantos y tantos cientos de miles de damnificados. Así, una paranoia compartida entre unos pocos, deviene en la destrucción de las vidas de muchos inocentes y víctimas de estos procesos mafiosos, que difícilmente levantarán cabeza y que sus descendientes continuarán sufriendo en sus propias carnes y bolsillos.

El tejedor, el psicópata de este film de pesadillas lleno, se marcha, se quiere ir, parapetado en la inmunidad de un nuevo cargo que le blinde cuatro años más –las prescripciones siempre juegan a favor de estos criminales-. Eso, sí, se va antes de que el buque fantasma que abandona, cual cobarde, se hunda. Porque este buque hace aguas por todas las vías y su línea de flotación ya está sobrepasada, a punto de la zozobra que durante cuatrienios se fue gestando por su proceder reiteradamente equivocado y criminal. Mientras, el pasaje asiste impasible al predecible hundimiento, del que serán las únicas y verdaderas víctimas y , también, cómplices necesarios del naufragio y en nada beneficiarios del expolio del que han sido objeto continuado.

A este barco, sin puerto y a la deriva y, por cuestiones de todos ya conocidas y sufridas, será un aeropuerto quien lo termine de hundir, es el puyazo final y definitivo, la herida de muerte a la región de Murcia.

Pero él se va, feliz y contento al retiro dorado…

… Si ustedes así lo quieren, que no olviden que le tendrán que votar. En sus manos está que consiga el premio, que dice tener ganado, a costa de la ruina de Murcia.

¡Habrá más cinismo!


Por Dios y por la Virgen bendita. 

martes, 24 de septiembre de 2013

LA INUTILIDAD DE LA CLASE POLÍTICA

Desde hace unos cuarenta años, cuando la banca y el sistema financiero consiguieron hacerse autónomos y libres al mil por cien,  para poder hacer lo que más les conviniera, hemos venido asistiendo al declive paulatino y sin freno de la clase política. Pasadas esas cuatro décadas, las clases políticas son solo cortafuegos entre aquellos potentados y los, cada vez, más empobrecidos ciudadanos.

Así las cosas, esa clase pseudo política ya no se encuentra disponible para satisfacer las necesidades y progresos de los pueblos, ahora son los más serviles siervos del poder bancario, financiero y empresarial. Son estos los que deciden qué, cuándo, dónde y qué hacer. Las normas y Leyes que ejecutan no buscan el desarrollo y bien estar de la gente, ya solo buscan el enriquecimiento –que ya es obsceno- de esas clases de oligarquías endemoniadas y poseídas por los malos espíritus (Que haberlos, haylos)

Europa, y dentro de ella España, es un claro ejemplo de lo dicho. Los psicópatas han tomado el poder por el camino corto del engaño y defienden a quien le paga, no hay otra. Porque, eso de que es el ciudadano el que a través de sus impuestos paga los costes de esa clase, solo es cosa del imperativo legal. Otra cuestión es el futuro tras su paso por la política que bien se aseguran en graciosas y generosas concesiones de lo que es, exclusivamente, de todos.

Hoy esa clase política, la más mediocre y ruin, está centrada de forma exclusiva en trasvasar todos los recursos de la Nación a la clase económica. A esa clase económica que ha hecho de la especulación, el soborno y la corrupción sus armas más certeras e infalibles. De tal forma, que todo lo conseguido por el trabajo de todos los hombres y mujeres, pasados y aún presentes, ha sido y está siendo dilapidado en un pís-pas. Esa clase política ya dejó de mirar por la gente. Sólo mantiene los ojos fijos en el resultado económico-financiero de la empresa y del banco amigo. Lo demás les resbala. ¡Ándeme yo caliente y ríase la gente!

Ni siquiera tienen un plan para enderezar la economía nacional, ni saben qué es eso. Hoy ya no se llevan esas cosas. Ahora es más fácil arrebatar los recursos a la masa y en eso están y no pararán hasta que la pobreza vomite cerca de ellos y eso nunca será posible, que ya se encargan de mantener las distancias. ¡Faltaría más!

Esa clase económico-financiera-empresarial, hoy, no tiene fronteras y lo mismo hoy están aquí que mañana se van allí. Ocurre igual con su dinero, nadie sabe dónde está, o, sabiéndolo, mejor ni preguntan. Pero, nosotros, la gente y por el contrario, siempre estamos en el mismo sitio y no podemos movernos con tanta soltura y desenfado. Y menos cuando los años se acumulan y los posibles ya nos obligaron a gastarlos. Esta es una parte de la globalización que nos vendieron, otra mentira más del sistema que estas oligarquías endemoniadas y posesas nos impusieron con el beneplácito de los políticos más cutres y traidores para quienes los auparon a las altas instancias del poder político.

Uno mira hacia todos los lados, a la izquierda, a la derecha, al centro, atrás y no ve nada bueno, nada que atisbe esperanza alguna. Hay un camino ya trazado al que todos parecen seguir con la mayor de la resignación. Porque cuando se dice que el rico le roba al pobre, se llama negocio y cuando el pobre pelea por recuperarlo, se llama violencia. Hasta este punto hemos llegado y nos han hecho entender que es así, sin más. Recordemos que todo empezó por la necesidad de que cada uno tuviera su dinero bien guardado, lejos de los asaltantes de caminos y ladrones. Fue de esta necesidad la aparición del monstruo que hoy nos está devorando hasta los calcetines.

Además, decía Wright Patman (1928-1976) que: “Todavía no he encontrado a nadie que pudiera justificar, de una manera lógica y racional, que el Estado tenga que pedir prestado a los bancos el uso de su propio dinero. Creo que llegará el día en que el pueblo exija que esto cambie. Llegará el día en que nos echaran la culpa a nosotros, el Congreso, por permitir que este estúpido sistema continuara”  Esta es la cruda realidad y hasta donde se ha llegado por la omisión y la depravación de la clase política.

Por ello, es lícito pedir acabar con esa disciplinada clase política que sólo tiene ojos ante los poderosos y se ciega ante la cruda y, cada vez más denostada, realidad social a la que nos están conduciendo. En pocos meses habrá una convocatoria para las elecciones europeas. Sería un buen momento de no pasar por las urnas y dejarles sin los instrumentos que les damos y que ellos utilizan, traidoramente, en nuestra contra.


Mientras llega mayo se pueden hacer más cosas ¡Hagásmoslas!

martes, 17 de septiembre de 2013

ALABADO, ¡OH SEÑOR!, SEA TU PARTIDO POPULAR

Por siempre, ¡Oh Señor!, sea alabado. Porque no olvidamos que son los descendientes de aquella Cruzada contra los infieles de tu reino y de aquellos que no están dispuestos a que sus negocios, prebendas y privilegios que la Historia tuvo a bien otorgarnos sean puestos en peligro alguno. Muchos dieron su sangre y otros fueron vilmente vilipendiados por las hordas bárbaras de los no creyentes. A todos ellos los canonizamos y convertimos en mártires de nuestra causa y de la tuya, ¡Oh Dios celestial! (Próximamente en Tarragona)

Estos dirigentes de pacotilla pepera en cuanto alcanzan el poder del Estado se dedican a lo único que saben: a joder al pueblo al máximo y a enriquecerse personalmente ellos y sus amiguetes. Quisiera yo, desde estas letras, agradecer a esos 10.830.693 de ciudadanos ignorantes, el apoyo que dieron a este privilegiado partido para que alcanzara, de nuevo, la Moncloa. No tuvimos bastante con aquellos ocho años donde aquel bigotudo, el marido de la alcaldesa por carambola de Madrid, la del café con leche en la plaza Mayor pero en inglis, nos metió en la falsa guerra de los EE.UU., con Irak, en contra de la opinión de todos los ciudadanos que negaban en la calle la participación de España en un conflicto del que todas las excusas eran falsas y los engaños y mentiras saltaban a la vista. El mismo que hablaba en catalán en la intimidad y tejano cuando ponía sus asquerosos pies sobre la mesa de centro de uno de los mayores psicópatas que el mundo ha parido.

En apenas 15 meses de mal gobierno de la oligarquía nacional católica y empresarial el resultado no puede ser más desastroso:

* Están a punto de romper la unidad de España, sí, esa de la que tanto se les llena la boca.

* Después de haber subido todos los impuestos y tasas nacionales, comunitarios y locales resulta que nuestro déficit sigue en aumento y que nuestra deuda anda ya por el 93%

* Mal gastan nuestro dinero en fatuas historias que no convencen a nadie, excepto a los que de ellas hacen fecundos negocios. Como la tercera vez que pretendía obtener los juegos olímpicos de 2020

* Se han vuelto a posicionar a favor de otra guerra. Ahora contra Siria.

* Van a rebajar el poder adquisitivo de nuestros ancianos y de las futuras pensiones. Además del incumplimiento de la Ley de La Dependencia.

* El ministro Soria, el que privatizó el sol a favor de las energéticas, ahora reconoce que la fusión de Iberia con la Britis Airways no ha sido buena para los intereses españoles. No hay que ser ningún cerebro para saber lo que ocurriría, que es, precisamente, lo que ha ocurrido: Aprovechando la fusión, los ingleses reducen los vuelos de Iberia a Sudamérica y ellos aumentan los suyos. Nos quitan nuestro mercado y lo hacen suyo. ¿Qué esperabas?

* El ministro Wert, parece alegrarse porque 600.000 alumnos no tengan ayudas para los gastos de libros y material. También de que más 20.000 alumnos pierdan las becas por no alcanzar el 6,5 en sus calificaciones. Todo esto y los recortes del profesorado y de las suplencias lo pagará caro el País en un futuro próximo.

* La ministra beata y romera donde las halla que le va a quitar a los jubilados un 20 ó 30% de sus pensiones. Además de pagar por sus medicinas, ahora una vuelta de tuerca al sobre y que ya no podrá ayudar a hijos y a nietos, como hasta ahora.

* Bankia, la caja pepera por excelencia y la que más ayudas a la banca ha recibido de fondos españoles y europeos –que los estamos pagando entre usted y yo- no era una caja al uso, era una cueva donde más de 40 ladrones se repartían el botín de los contribuyentes.

* Por cierto, en los Tribunales Lentos de la Justicia española duermen el sueño eterno más de 1600 causas de corrupción. ¿A quién o quienes sirve esta Justicia? ¿Darán lugar a la prescripción de los 1600 casos o simplemente lo dejaremos en el olvido como a Gibraltar? En Murcia, por ejemplo, tenemos el caso del exconsejero de todo, el Marqués, que lleva ya más de 5 años criando telarañas. ¿Tan difícil es ese caso? ¿En qué momento se halla el proceso? Demasiado lento.

* La alcaldesa de Madrid les pide ahora a los madrileños que se rían. Los madrileños empúados en más de 7000 millones de euros, no están para muchas risas. Pero, ¡Claro! ¿Qué le importa a ella? Aún mantiene al mayordomo municipal para servirle el café y cuenta con el despacho de la alcaldía más grande del mundo.

La cuestión es que ahora mandan al Floriano para que cuente, según le ha dicho Rajoy, que ya estamos saliendo de la crisis y que esto va a cambiar ¡pero ya! Este cuento no se lo cree ni el más tonto del pueblo, porque la realidad no es como quieren pintarla, la realidad es de quiebra total del Estado. Esto tiene cuando al mando del mismo llegan los más mediocres y los más sinvergüenzas de este reino impuesto por el dictador que murió cableado en la cama. Pronto volverán a subirnos los impuestos y tasas, ya lo verá.

Termino reiterando las gracias a esos 10.830.693 españoles de bien, que hicieron posible que esta panda de católicos-mafiosos alcanzarán el poder político de un País que hoy carece de futuro alguno. Han sido ustedes y no otros, los culpables de la situación por la que estamos pasando más de 40 millones de españoles, ustedes incluidos. Ustedes son los únicos culpables de que este País se esté yendo a la mierda. Gracias a ustedes, este partido fascista y que gobierna por Decretos, está empobreciendo a la mayoría de ciudadanos. Sus hijos y nietos también se lo agradecerán algún día, si no se hacen banqueros o políticos con sobresueldos o jueces o fiscales de la cuerda. Por que si no lo hacen serán una porquería de súbditos empobrecidos e ignorantes, sin médico que les atienda ni universidad que los enseñe.

El cinismo del que hacen gala es tan profundo que a ustedes, los más pusilánimes del reino impuesto, les convencen con una ristra de retahílas mentirosas y falsas, que ustedes se tragan sin mascar. Sigan tragando, sigan hasta que ya no puedan más y que les aproveche.

P.D. Señor, la próxima vez elige bien a quienes han de propagar tu Palabra, porque todos estos, que tanto se vanaglorian de servirte, no te dejan en buen lugar, más bien al contrario. ¡Señor, Tú sí puedes! ¡Loado seas por los siglos de los siglos, amén!

Que jamones como estos no nos hacen ninguna falta, por fa.

jueves, 5 de septiembre de 2013

EL TEATRO DE TODAS LAS MENTIRAS Y TRAGEDIAS

Decía José Saramago (1922-2010) que “En ningún momento de la historia, en ningún lugar del planeta las religiones han servido para que los seres humanos se acerquen unos a los otros. Por el contrario, sólo han servido para separar, para quemar, para torturar”

Al igual que yo, también usted coincidirá totalmente con la aseveración del humanista, porque esa y no otra es la realidad. Toda nuestra historia lo confirma y nuestro presente en el Próximo Oriente lo ratifica. La más sangrienta de las batallas está fraguándose y quizás sea la última antes de nuestro propio fin por el imperativo legal de un Cosmos en continúo movimiento y agitación.

En el principio era el hombre politeísta y hace unos dos mil años pensó en hacerse monoteísta. Un solo dios sería más sencillo, pensarían nuestros ancestrales sumos sacerdotes, para que las gentes entendieran el asunto éste de lo religioso y así el cegado acatamiento de la obediencia, más fácil. El caso es que tampoco se llega al uno, pues nos advierten de que hay una trinidad que, además, es santa. O sea que son tres. La cuestión es que el fenómeno religioso para lo único que ha servido es para mantener a las gentes de todos los siglos y condición en la más absoluta ignorancia, en la más absoluta desigualdad y en la mayor de las complacencias y conformidad posibles. “Qué dios te lo pague”, “Qué dios te perdone”, “Qué dios te lo premiará”, “Qué dios es bueno y perdona a todos” “Qué hay un cielo y un infierno” “Paga tus deudas”. Todo falso.

Comenzó el hombre creyendo que dios era el sol, el agua y el aire, pues la mera observancia de la falta de cualquiera de ellos supondría la ausencia de toda vida que conocemos. Ésta no sería posible sin la interdependencia de esos tres elementos, tan magistralmente orquestada. Así, desde el principio de los principios, el hombre adoraba al sol, al agua y al aire, como benefactores máximos de su propia existencia, sus dioses al fin y al cabo y qué bien hubiéramos hecho de conservarlos sin necesidad de aumentar el panteón, que a tanta desgracia secular nos ha conducido.

Al paso de los siglos, el hombre fue aprendiendo más cosas, a pesar de los pocos, y entendió que nuestro planeta no estaba solo, que éramos uno más en un sistema solar perdido en un galaxia y que ésta era una más de los miles de millones de galaxias conocidas hasta ahora. Y comprendió que ese concepto de ser superior tendría que ser, cuando menos, más complicado, más complejo y, de tanto, inalcanzable a nuestro corto nivel y primitivo intelecto. Una búsqueda de otras inteligencias, de otros seres agraciados con la máxima evolutiva, hubiera sido lo más razonable. Búsqueda oculta bajo los intereses del desconocimiento obligado e impuesto por las castas. Y máxime cuando la arqueología tantas y tantas pruebas nos ha dado de su presencia junto a nosotros y que bien podríamos hablar de un dar vueltas a una rueda milenaria de la que no conseguimos salir.

Sin embargo, todo queda reducido a una serie de conceptos que impiden la razón y apelan a aquello tan manido de la fe, que no necesita de la característica más sobrenatural de la propia creación: La Inteligencia. El más grande acto de un ser casi divino –el hombre- al que, unos pocos, quieren durmiente, silente, absorto y alejado de su máxima condición y de las posibilidades que ésta conlleva de acercamiento real al Ser Supremo.

Quizás, o no, para continuar con la estrategia secular de la dominación de unos pocos sobre la inmensa mayoría, procurando la ocultación de toda verdad y del alumbramiento de todas las capacidades inherentes a la inteligencia con las que el creador nos dotó. Creador que no dios. Encerrados, pues, entre los barrotes de la impuesta limitación cognitiva por nuestros propios creadores “Hagamos al hombre a nuestra imagen y semejanza” (Génesis) se hace necesaria la pregunta de que ¿Para qué fuimos creados? ¿Quiénes son realmente nuestros creadores? ¿Qué sentido tiene crear un vehículo que alcance los 500 km./hora, si no podrá ir a más de 120?

“La ocultación de ideas molestas puede que sea corriente en la religión o en la política, pero no es el camino a la sabiduría y no tiene sentido dentro de la tarea científica” “Sabemos quienes hablan en nombre de las naciones, pero ¿Quién habla en nombre de la especie humana? ¿Quién defiende a la Tierra? (Carl Sagan)

“Las doctrinas religiosas y las mitológicas de la maquinación humana son aquí los principales objetivos de ajuste y control. Puesto de una manera cruda, estamos siendo manipulados por nuestros propios sistemas de creencias, que a su vez son implantados, influidos y guiados por fuerzas “alienígenas” que están fuera de nuestras identidades conscientes” (J. Allen Hynck 1910-1986 –astrónomo, ufológo-)

Son los ángeles caídos, los extraterrestres desviados, los que nos gobiernan en este planeta tierra. Son ellos y los secuaces terrenos los responsables, quizás, de nuestra propia existencia. Nos crearon para servirles como esclavos y aún lo seguimos siendo. Las estructuras de poder que conocemos llevan miles y miles de años siendo exactamente las mismas, sólo perfeccionadas y adecuadas a los nuevos tiempos. La guerra, el instrumento final del que se sirven para imponer su “voluntad divina” Todo manejado desde la mentira de todos sus preceptos y que ellos convierten en verdad.

“El Vaticano es el verdadero controlador espiritual de los iluminati y del nuevo orden mundial. Mientras, los jesuitas a través del papa negro, controlan realmente la jerarquía vaticana y la iglesia católica romana” (Gerard Bufford –ex arzobispo de Guatemala, expulsado por el Vaticano)

“Durante la mayoría de los cónclaves, en vez de manifestarse el espíritu genuinamente evangélico de los cardenales allí reunidos, lo que salió a relucir, y a veces de una manera descarada, eran las ambiciones humanas, las envidias, las intrigas y todos los defectos humanos que afloran en las elecciones para puestos públicos” (Salvador Freixedo –ex sacerdote jesuita)

Todo son estructuras para el engaño a las gentes. Sofisticados mecanismos que crean confusión y angustia y procuran el abatimiento de los individuos. Estructuras de hermosos significados y contenidos que jamás logran sus objetivos teóricos. Todo son trampas. Chantajes, coacciones y engaños. Nuestro mundo, nuestra vida entera es tan solo una gran estafa. Porque ninguna de las estructuras –que tanto nos cuestan- creadas para el beneficio del hombre ha cumplido con su objetivo. Igual que decía Saramago con las religiones. Deduzcamos entonces que vivimos en una completa farsa o, como decían los clásicos, en un puro teatro. Teatro de tragedias que no de comedias, que bien distintas son unas de otras.

Somos, a la vista de todo esto, una especie, una civilización perdida que no ha procurado, siquiera, el gozo de la vida que nos fue regalado. Que continuamos cumpliendo una penitencia por un pecado cometido por aquellos que nos crearon “a su imagen y semejanza” y del que parece que nunca seremos liberados. Porque, no es que se prodiguen mucho, pero los ángeles no caídos, los extraterrestres fieles a los principios del cosmos, nos tienen un poco olvidados. Han pasado unos miles de años desde su último intento de redimirnos, intento fallido como sabemos, y aquí seguimos sufriendo este infierno en el que los otros convirtieron a este bello planeta, con la inestimable y necesaria ayuda de los más avispados de nuestro género, que hacen de la codicia y avaricia las fuentes de su poder terreno. Morirán como todos nosotros, porque no otro es su fin. Pero lo habrán hecho ayudando a los malignos y eso nunca les será perdonado por el verdadero Creador que los mantendrá en la mayor de las oscuridades evo tras evo.

Mientras tanto, vayan tomando asiento y observen, que LA FIESTA DEL TEATRO DE LA TRAGEDIA va a dar comienzo. El escenario será pasto de las llamas, los actores e intérpretes aniquilados y nosotros, los simples espectadores de una obra que nunca fue nuestra, las victimas inocentes de un panfleto impuesto y en el que nunca nos dejaron participar.

Es probable que nuestro tiempo y ciclo (13.525 años) estén próximos a su fin y, tras la desaparición de lo viejo, obsoleto y enviciado, vuelvan las verdaderas sangres reales para hacer cumplir el único mandato cierto y verdadero:

“Vivid y disfrutad del Paraíso,  
que ya no hay más pecado".