Gracias a dos denuncias, una del incansable, constante y muy digno concejal de Movimiento Ciudadano, D. José Cavite y verdadero azote del desgobierno impopular de Pilar Barreiro y otra desconocida, la Fiscalía murciana ha decidido investigar las cuentas del Auditorio y Palacio de Congresos de Cartagena. Loada sea.
La noticia ha sido recibida con
mucha alegría en el pueblo cartagenero que anda muy mosqueado porque no ha
habido obra de su alcaldesa, que no haya contado con irregularidades
manifiestas. Todos conocen los verdaderos desmanes en la adjudicación y en la
ejecución de cualquiera de ellas. Casi todas las obras realizadas en Cartagena
han visto sobrepasados sus presupuestos iniciales.
El buque insignia de la flota de
obras realizadas por los distintos gobiernos de la excelentísima señora, en los
18 años que lleva gobernando, es este Auditorio. La mayor inversión de dinero
(De los 22 millones de euros iniciales ha terminado costándonos 64) de todos
los cartageneros por su cabezonería en el peor emplazamiento posible. En un
edificio que sus paredes no cuentan con ventanales, ni ladrillos, sólo planchas
de policarbonato de colores que, por la acción solar y marina se están
descolorando a marchas forzadas y que, en pocos años más, habrán de ser
sustituidas, si antes no viene un vendaval y las arranca todas. Un edificio que,
tras nueve años de arduas tareas contra la fuerza del mar, se adjudicó la
gestión a una empresa amiga del alma. Con un contrato que le eximía de los
gastos de mantenimiento y reparación de todo aquello que se ponía a su
disposición y que pagamos los cartageneros por otras vías. Con la idea de que
sólo y exclusivamente se ocuparan de las actividades a realizar y no de esas
cuestiones tan engorrosas y caras. Y, además, con un regalo: entre lo comido y
bebido, 1 millón de euros anuales para 6
ó 7 años, por si la gestión no es lo suficientemente beneficiosa. Será para
atender el “beneficio industrial” que toda mercantil ha de obtener. Aunque aquí
el caso no es comparable a una lícita actividad privada que corre con toda la
inversión de la A a
la Z. Aquí se
les ha concedido la explotación de unas instalaciones pagadas y reparadas,
cuando corresponda, con el dinero público de los cartageneros y si ha de haber
un beneficio serían los cartageneros los únicos beneficiarios. Este caso es el
exponente máximo de la política pepera: Con lo público, lo privado se lleva
los billetes. Es la tan ansiada
“Privatización de lo Público” que ellos propugnan. Habría que preguntarse si existe
alguna comisión municipal que audite las cuentas de dicho auditorio. Los
cartageneros tienen todo el derecho a conocer cuáles son los resultados
económicos de la gestión. Una comisión municipal que funcione. No como la que
tendría que auditar a Aquagest y que nunca llega a ponerse en marcha. ¿Por qué
será? En Cartagena el PP incumple su programa de transparencia desde 1995.
Otro caso es el de una
adjudicación de GPS de bolsillo para los turistas, 100 unidades. Una más, de
las numerosísimas adjudicaciones, que se llevan hechas a empresas relacionadas
con un ex alcalde de Cartagena. Esta fue denunciada por la empresa Bluguia,
S.L. ante el Contencioso de Cartagena y recurrida por el Excmo. Ayto. La
sentencia de la sala del Contencioso del TSJ de Murcia ha dado la razón a Bluguia
y ha dictado que el proceso de adjudicación ha de volver a sus inicios. Les
cuento: 1º.- Algún interesado en el tema convence al Ayto., de la necesidad y
modernidad que supone un GPS para que los turistas no utilicen los obsoletos
planos y guías de toda la vida. 100 serían las unidades y la licitación en
390.000 eurillos. Cada uno sale por la cantidad de 3.900 eurillos de nada
(Cualquier GPS bueno sale por 200€) Esto cada vez se parece más a la página web
del Senado ¿Habrán sido los mismos? Eso, si, se incluye el mantenimiento ¿Es
que van a cambiar de sitio los lugares de interés o quizás el trazado de las
calles? Y por 2 años, prorrogables otro año y medio. 2º.- Se presentan dos
empresas, la ya mencionada y Catalia Digital, S.L. La primera con amplísima y
demostrada experiencia, la segunda na´ de na´. 3º.- El caso es que desestiman
la oferta más barata de Bluguia (285.000) con el argumento de “Baja temeraria”
y se lo adjudican a Catalia por el mismo precio de la licitación 390.000.
Catalia es una sociedad del Presidente de la COEC en Cartagena e intimo y socio del exalcalde
en otras empresas como la adjudicataria del Auditorio. Todo queda en casa,
atado y bien atado y en los bolsillos de cuatro. Pero no piense, amigo lector,
que se trata de trato de favores, son los negocios y que, como los caminos del
Señor, son inescrutables… Y más cuando se confunde la Democracia con la Dictadura.
A mí me gustaría saber, como
ciudadano de Cartagena, ¿Cómo se hace esto? ¿Les van a devolver a Catalia sus
100 unidades? ¿Les va a exigir el Excmo., el reintegro de los 390.000 eurillos?
¿O simplemente no se va a cumplir la sentencia como con la coronación de La Muralla del Mar? Con la
crisis y subida de impuestos y tasas estaría bien recibir esos 390.000, que
considero que jamás se tuvo que hacer tal dispendio en esto años de horrible
crisis.
Esperemos que Su Excelentísima
sea diligente en el cumplimiento de la sentencia judicial y no haga dejación de
sus funciones como en el caso de Residencial Puerta Nueva, S.A. (La madre de
todos los chanchullos habidos y por haber en Cartagena) que, al final, no
pagará los 3,5 millones por las componendas contables y préstamos inter-socios, y que sí pagaremos,
vía tasas, los cartageneritos.
En los próximos 10 años, este
excelentísimo Ayuntamiento de Cartagena sólo podrá atender los pagos a los
bancos y al Estado por los préstamos realizados por ambos. No podrá acometer
inversión pública alguna por que no le quedará ningún dinero. Aunque, para
esconder estas vergüenzas, echará mano de la fiel Aquagest, otra amiga del alma, que realizará las obras
necesarias o no, vía subidas del recibo del agua. Algún día la Comisión de Seguimiento
de esta Concesionaria se reunirá, y con la participación de la oposición, sabremos
un poco más de por qué pagamos el agua más cara de toda España.
Todos los cartageneros son ya
conscientes del desastre de estos casi 18 años de la gestión de Pilar,
alcaldesa y diputada donde las haya. Cartagena no ha avanzado si no
retrocedido. La alcaldesa no se ha preocupado por el crecimiento ni por el bien
estar de los cartageneros. Sólo ha estado ocupada en dar satisfacción a sus
amigos del alma y hacia ellos han ido todos sus desvelos y esfuerzos. Y los
cartageneros pagando. No sólo a través de nuestro dinero, si no, a través de la
miseria que no ha parado de aumentar. Para finalizar aprovecho para preguntar
por los gastos asignados a Alcaldía, ¿Podremos conocerlos alguna vez los
cartageneros? ¿O ahora, que la
Excma., renunció hace unos meses, a sus 1.500 euros por
pleno, va a ser más difícil? El caso es que el gobierno de esta mal llamada
Región de Murcia es el menos transparente de todos los gobiernos autonómicos.
¿Tanto es lo que esconden? Y ¿Por qué lo esconden? ¿Tendrá, tanto oscurantismo,
algo que ver con la ruina de esta Región?
Es así como algunos han hundido a
esta España de charanga y pandereta, cerrado y sacristía, devota de Frascuelo y
de María, que dijo mi amado Machado.